domingo, 18 de enero de 2009

Ya no juego más. ¡Qué harta estoy de perder(te)!

Y nada más triste y doloroso que encontrarme una carta tuya dónde ayer estabas tú.


Cariño, perdóname.

Por ser tan egoísta e irme de repente. Por abandonarte cuando más me necesitas. Por no volver. Por tenerte ilusionada y luego dejarte caer de golpe. Por dártelo todo y después dejarte en la nada. Por hacer que llores sin que tus lágrimas arreglen mi marcha. Por decirte todavía, a pie de huida, que te quiero. Por recordarte que serás feliz otra vez, sin mí. Por pedirte todo lo que me dabas y no darte todo lo que tenía. Por no ofrecerte más que llamadas, y si quieres alguna visita. Por pedirte que me olvides y yo no hacerlo. Por obligarte a seguir sin que esté yo contigo. Perdóname por huir. Y por no decirte, todavía, lo mucho que de ti he aprendido. Y no te digo que te quiero, porque posiblemente, te enfades conmigo.

1 comentario:

soyborderline dijo...

Entre otras cosas es un mensaje contradictorio. Soy de las que piensan, que ese tipo de cosas, se dicen a la cara. Es jodido, no dar la oprtunidad de que la otra parte responda.
Un abrazo muy fuerte.